Hoy en día, cualquier empresa puede resultar afectada por un exploit. Si quieres saber lo que es, en la siguiente guía te contamos todo sobre este tipo de virus, cómo afectan a una empresa y cómo protegerse. ¡Descúbrelo!
En la actualidad, un exploit es un tipo de virus frecuente que acecha a muchos usuarios. Estamos ante un código que aprovecha una vulnerabilidad en un sistema o software para posteriormente ejecutar un comportamiento no deseado por los desarrolladores.
Los exploits, aparte de para un uso malo, también se utilizan en la industria de la seguridad informática para probar la seguridad de los sistemas y para demostrar la presencia de vulnerabilidades que necesitan ser corregidos. Es una forma de poder adelantarse a que algo malo ocurra, para tratar de probar bien los sistemas, a prueba de fallos y de hackeos.
Por ejemplo, un exploit puede ser utilizado por un hacker para tomar el control de un equipo, robar información o realizar otros tipos de actividades maliciosas. Puede llegar a ser muy peligroso si se utiliza con fines malintencionados. Aunque desde el punto de vista de la ciberseguridad, como te contamos, al usarlo también permite corregir vulnerabilidades antes de que sean explotadas por los hackers.
Un exploit realmente es como un código malicioso, un tipo de ciberataque que se aprovecha de las debilidades del sistema para acceder sin permiso o ejecutar un virus. Por lo que es un mecanismo para expandir un virus en el sistema.
Para saber mejor cómo funciona, es importante conocer sus tipos. Los principales son los siguientes:
Un exploit puede ser fatal para una empresa, sobre todo si no se está preparada.
Uno de los principales problemas a los que se enfrenta una empresa que es atacada con un exploit, tiene que ver con cómo afecta a los niveles de privilegios. Normalmente, en una empresa hay roles y cada uno tiene unos determinados privilegios. El problema, es que el hacker podría conseguir los máximos y hacer daños muy graves.
Es el tipo que se conoce como exploit de elevación de privilegios. Es muy peligroso y mediante él, el atacante obtiene los permisos más altos posibles, para ejecutar acciones más determinantes para la compañía.
Indudablemente, lo desconocido siempre da miedo y es un riesgo que tienen las empresas y los usuarios. Digamos que, los exploits están ahí. Sin embargo, puedes tratar de protegerte para ir un paso por delante del atacante.
¿Qué formas hay de protegerse? Principalmente, las siguientes:
¿Te ha quedado alguna duda sobre los exploits? ¡Pregúntanos!